Los pilares de la tierra

¡¡¡Saludos, queridxs yogurines y amantes de los libros!!!

En esta reseña entre semana, les traigo la reseña del libro que dio origen a una serie bastante popular y que atrapa aún a propios y extraños.

Cómo la ficha de autor está en la reseña de Las tinieblas y el alba, aquí solo pasaremos a la opinión personal de esta reseñadora sobre este libro.

Sinopsis:

Los Pilares de la Tierra es una novela histórica del autor británico Ken Follett ambientada en Inglaterra en la Edad Media, en concreto en el siglo XII, durante un periodo de guerra civil conocido como la Anarquía inglesa, entre el hundimiento del White Ship y el asesinato del arzobispo Thomas Becket. Sin embargo, también se recrea un viaje de peregrinación a Santiago de Compostela a través de Francia y España.

El gran maestro de la narrativa y el suspense nos transporta a la Edad Media, a un fascinante mundo de reyes, damas, caballeros, pugnas feudales, castillos y ciudades amuralladas. El amor y la muerte se entrecruzan vibrantemente en este magistral tapiz cuyo centro es la construcción de una catedral gótica. La historia se inicia con el ahorcamiento público de un inocente y finaliza con la humillación de un rey.

El autor sorprendió con esta novela no sólo a sus lectores, ávidos de thrillers, sino también a sus editores con su contenido y longitud (más de 1300 páginas). Fue publicada en 1989, y se convirtió en el mayor best seller de Follett. Los Pilares de la Tierra es la obra maestra de Ken Follett y constituye una excepcional evocación de una época de violentas pasiones.

Opinión personal: 

“Al volverse, Philip se encontró con el grupo visitante al completo, todos ellos a caballo y con lujosa indumentaria, contemplando atónitos la escena que les rodeaba. Allí estaba el obispo Henry, hombre bajo y fornido, de gesto huraño, cuya cabeza afeitada contrastaba con la capa púrpura bordada. Junto a él se encontraba el obispo Waleran, vestido, como siempre, de negro; su habitual mirada de desdén glacial no lograba disimular del todo su consternación. También les acompañaba el obeso Percy Hamleigh, su fornido hijo William, y Regan, su horrenda mujer. Percy y William miraban todo boquiabiertos, pero Regan comprendió al instante lo que el prior había hecho, y estaba furiosa.

Philip volvió nuevamente su atención al obispo Henry y quedó sorprendido al ver que éste lo miraba con gran interés. Philip le devolvió la mirada con toda franqueza. La expresión del obispo Henry era de sorpresa, curiosidad y una especie de respeto y sorna.”

Este libro contiene 18 largos capítulos, más un prefacio, una introducción al libro (ambas escritas por el autor en los 25º y 10º aniversarios, respectivamente). 

Primera parte. 1135-1136

Los primeros cuatro capítulos son los que integran esta parte.

Aquí podemos ver el inicio de los tejes y manejes de la política, con nombramientos de puestos eclesiásticos, rebeliones… Y la quema de una iglesia.

Segunda parte. 1136-1137

Esta parte abarca los capítulos V, VI y VII

Aquí se produce un hecho que le va a cambiar la vida a uno de los protagonistas. 

En esta parte se comienza a mostrar la magnífica personalidad de Aliena, como ella lucha por su familia aún desde la juventud. Es de lo mejor de esta parte.

Tercera parte. 1140-1142

Contiene los capítulos VIII, IX y X.

En esta parte pasan varios hechos que hacen que la novela comience a dar un giro de 360°. 

Un amor incipiente que queda truncado, una feria que acaba en tragedia y mucho dolor.

Cuarta parte. 1142-1145

Los capítulos XI a XIII, son los que abarca esta parte.

Aquí se narra tanto el peregrinaje de uno de los personajes hasta Santiago de Compostela y más allá hasta Toledo, como su vuelta con una imagen sagrada. 

Quinta parte. 1152-1155

Contiene los capítulos XIV, XV y XVI.

Aquí es donde se comienzan a cerrar las historias y, aunque hay algún que otro cabreo, puede decirse que se obtiene el inicio de un final feliz.

Sexta parte. 1170-1174

Aquí solo están los últimos dos capítulos y habla sobre todo de Thomas Beckett.

Habiendo leído primero la precuela, no puedo evitar comparar los personajes de este libro con los de aquel. Algo destaca en las primeras escenas ya de este libro y qué hace que se diferencie de la precuela; los personajes principales que podríamos llamar buenos son en realidad personajes de moralidad gris, lo que le suma un muy buen punto a este libro, ya que como recordarán si leyeron la reseña de la precuela, a mí me molestó mucho que en ese libro los malos fueran muy malos estereotípicos y los buenos fueran sumamente buenos y estereotípicos en cambio acá se nos presentan personajes grises.

La historia trata sobre la construcción de una iglesia, pero también es la historia de su constructor, el prior que encarga su construcción y las tensiones entre los gobernantes por ver quién se queda con la corona.

Y acá, mi lado historiador me obliga a frenarme un poco, porque para que se entienda mejor la novela se tienen que conocer un poco del contexto histórico en el que se sitúa: estamos en la Inglaterra del siglo XII, en un momento (al inicio y buena parte del libro) en el que la corona británica estaba en anarquía porque el rey Enrique I se había quedado sin heredero y su única hija mujer disputaba su poder con su propio primo, quien según las leyes de la época era el heredero legítimo que correspondería al no haber un príncipe heredero al momento de la muerte del Rey. 

Pero la novela no solamente se centra en las luchas políticas entre Matilde (en el libro la llaman Maud, su nombre original) y Esteban de blois (Stephen en el libro, respetando el nombre original), sino que además para entenderla hay que conocer la estructura social en la que se desarrollan estos hechos, entiéndase cuando hablo de estructura social a qué me refiero al feudalismo o sistema feudal. La estructura social de este sistema se puede entender de forma piramidal, siendo que en la punta de la pirámide está el rey como único señor y gobernante pero al mismo tiempo el rey es un primus inter pares  a quién los que estaban en el escalón más bajo (altos nobles y obispos) debían rendir pleitesía, en el tercer escalón se encuentra la baja nobleza y digamos algo así como una especie de bajo clero pero que no es totalmente bajo clero, porque en el último escalón nos encontramos con los monjes simples que por lo general venían de familias de campesinos los cuales estaban exactamente en el mismo escalón junto con los que trabajaban en algún oficio. 

Para hacer más claro el ejemplo vamos a tomarlo con los personajes de esta novela: tenemos a Tom que es el constructor de la iglesia y está en el escalón más bajo de la pirámide, junto con sus hijos, su esposa y su hijastro Jack (y presten atención a este nombre), luego en un escalón superior tenemos el ejemplo de el Prior Philip, el cual es el que ordena la construcción de la iglesia que está a cargo de Tom, y una familia, los Hamleigh, que ambiciona estar en un escalón superior al que están actualmente que es comparado con el Prior, esta familia a través de sus conexiones con el Obispo Waleran Bigod (que es del alto clero) logra escalar y ocupar el puesto en la alta nobleza que antes ocupaba el conde de shiring, padre de Aliena, la cual cae hasta el último escalón de la pirámide. Por último podemos decir que en esta etapa de anarquía los que están en la cima de la pirámide son Matilde y su primo, ya que ambos ambicionan el mismo puesto de rey. 

Ahora bien, tanto para construir la iglesia, como para mantener el priorato, como para solventar Las Guerras, los obispos señores y priores necesitan de la mano de obra de los campesinos y los trabajadores en oficios, los cuales pueden juntar dinero o especias para tanto comerciar para conseguir las piedras como comerciar para conseguir las armas, debido todo esto al sistema de vasallaje.

Ejemplo de este tipo de sistemas es cuando por ejemplo Philip toma el cargo de Prior y ve que las arcas del monasterio, del priorato, están vacías aún teniendo tierras en poder del priorato, que o se utilizan mal o directamente no se utilizan, y decide que lo primero que va a hacer es  organizar la manera en la que los campesinos le van a pagar el alquiler a los monjes, siendo que este alquiler en realidad es la cesión de un feudo y el pago por esa cesión.

Esto, aclaro, es a grandes rasgos, ya que la Edad Media (Periodo histórico de la civilización occidental comprendido entre el siglo V y el XV. Su inicio se sitúa en el año 476, año de la caída del Imperio Romano de occidente, y su final en 1492, en el año en que Colón llegó a América aproximadamente) se dividió en muchas etapas y hay que tener en cuenta que quizás no fue exactamente así como se vivió realmente en este siglo en particular, teniendo en cuenta que di rasgos generales (por ejemplo, ya el rey era casi absoluto y no un primero entre pares).

Después de todo, el poder de un rey no era absoluto. La voluntad del pueblo estaba en condiciones de refrenarlo.

Pero, volviendo a la historia que nos compete, Tom se da a la tarea de construir la iglesia para estar en mejores tratos con Dios y así salvar el alma de su primera esposa, además de que ese siempre fue su sueño.

“A medida que transcurrían las semanas cada vez se sentía más preocupado por el alma de Agnes, y se preguntaba si estaría en buen lugar o no. Temía acudir a un sacerdote para averiguarlo, porque no quería dar detalles. Pero se consoló con la idea de que si construía una catedral, con toda seguridad Dios le favorecería, y se preguntaba si podría pedirle que fuera Agnes quien recibiera los beneficios de ese favor en lugar de él. Si lograba dedicar a Agnes su trabajo en la catedral estaba seguro de que el alma de ella estaría a salvo y él podría descansar tranquilo.”

Aliena, por otro lado, es un personaje muy fuerte. 

En comparación a Ragna (protagonista de Las tinieblas y el Alba), ella es un personaje que su fortaleza atrae al lector y sus capítulos enganchan más que los de Ragna. 

En este libro hay más personajes femeninos fuertes, pero es Aliena la que más atrapa, no solo porque se la muestra como una doncella atractiva, lo que lleva a William Hamleigh a obsesionarse con ella y cometer atrocidades, sino que además es alguien que sabe anteponerse a las adversidades. Jura proteger a su hermano, hasta que él recupere su título de nobleza, lo que se convierte en su motivo para invertir el poco dinero que su padre les logró legar para convertirse en comerciante y conseguir todo lo que su hermano necesita para ser caballero del rey y así lograr su objetivo. Incluso es capaz de sacrificar su amor por lograr eso para su hermano. De hecho, lo único que me molesta de este personaje es que la describen siempre de una manera- digamos- machista, porque cada personaje que la describe es varón y siempre resaltan sus atributos femeninos (sobre todo la zona de los pechos) y que el verla enojada triste o furiosa hace que ellos se exciten, incluso cuando ni siquiera saben que se están excitando porque son de mentes demasiado muy infantiles. 

Y ya que nombramos al némesis de Aliena, vamos a destacar de él que durante todo el libro vemos su lento pero inexorable camino al infierno. 

William Hamleigh disfruta y se excita cuando tortura y v**la, razón por la cual es uno de los más grandes villanos de este libro. Sin embargo, a diferencia de los villanos de la precuela, no siento que sea estereotípico, ya que con él, el autor nos muestra la maldad de muchos lores y señores en la edad media (o bueno, lo que nos cuentan algunas crónicas).

En un momento se habla del derecho de pernada y se cuenta que ya para esa época no se usaba, pero él hace uso de ella. El derecho de pernada era un presunto derecho que otorgaba a los señores feudales la potestad de mantener relaciones sexuales con cualquier doncella sierva de su feudo que fuera a contraer matrimonio con uno de sus siervos (básicamente, legalizaba la v**lac**n a las mujeres por parte del señor feudal).

Por  otro lado, tenemos a Alfred,el hijo mayor de Tom. Desde el primer momento en que se nos lo presenta, podemos ver en él a alguien pendenciero, irascible y bruto. 

De niños, acosa a Jack y a su hermana menor, para después (siendo ya grandes) ser capaz de hacer infeliz a Aliena para hacer sufrir a Jack.

No llega al nivel de maldad de William, pero es uno de los personajes más despreciables de la novela. Este personaje hace que el de Tom sea más humano.

Sin embargo, es Jack quien se lleva el galardón al mejor personaje. Es tan complejo que es difícil de explicar porqué es el mejor personaje.

Lo conocemos de niño, cuando su madre decide seguir a Tom en su peregrinación para conseguir trabajo, y lo vamos viendo crecer hasta transformarse en el protagonista definitivo de la novela.

Es hijo de Ellen y Jack Shareburg (o Jacques Cherbourg), un trovador francés que fue acusado injustamente. 

Al crecer en el bosque y sin un padre, hasta que Tom toma ese lugar, Jack tiene una manera de ver la vida que muchos envidiarían aún hoy. 

Por motivos de la trama que no puedo revelar, Jack termina viajando desde Kingsbridge hasta Santiago de Compostela y mas allá, hasta Toledo (todo esto en España) para ampliar sus conocimientos. 

“Jack vivía con un pequeño grupo de clérigos ingleses en Toledo. Formaban parte de una comunidad internacional de eruditos que incluía a judíos, musulmanes y cristianos. Los ingleses se dedicaban a traducir obras de matemáticas del árabe al latín para que pudieran ser leídas por los cristianos.”

Pero aún con todos sus conocimientos, cuando ve una nueva construcción, se sigue maravillando como un niño y preguntándose si acaso no se valieron de la magia para levantar los muros. ¡Lo amo!

Richard, el hermano de Aliena es un personaje de lo más ambiguo: es quien debía heredar el título de señor de Shiring, pero al perderlo el padre, juró junto a su hermana hacer todo lo posible por recuperarlo. Su manera de hacerlo fue volviéndose caballero del rey (razón por la cual su hermana tuvo que sacrificar todo). 

Es un personaje bastante endeble, de poca personalidad, pero es un gran guerrero y sabe proteger a sus conciudadanos.

“—¡No hay nadie al otro lado de la ciudad! ¡Puede haber un segundo grupo introduciéndose por detrás de nosotros! ¡Volved a vuestros puestos! ¡Rápido! —Mientras empezaban a alejarse, dijo a Jack entre dientes—: ¡No hay disciplina! ¡No hay ninguna disciplina!”

Lo que más atrae del libro, además de la construcción de la iglesia y de la historia real en que está situada la novela, es la historia de amor: es muy típica y cliché (porque incluye el tropo de Amor prohibido entre dos clases distintas, ya que uno es de la clase popular, la que está en lo último o casi en lo último de la pirámide social de la época feudal, y la otra es de la clase noble y luego comerciante, o sea de el segundo o tercer escalón de la pirámide social de la época feudal), pero tiene ese toque de culebrón que atrae. Ellos se conocen desde chicos, con el paso del tiempo van forjando una amistad bonita, sin darse cuenta se terminan enamorando y ahí es cuando todo se trunca, porque ahí es cuando todo está en contra de ellos (lo que lo hace un culebrón). 

“—Escucha, [...]—dijo—. Quiero que sepas lo terrible que ha sido todo esto para mí. Al principio parecía que me amabas; luego, dio la impresión de que me aborrecías, y ahora te vas a casar con mi hermanastro. No lo entiendo. Yo no sé nada de estas cosas, nunca había estado enamorado, y es todo tan doloroso… No encuentro palabras para expresar lo malo que es. ¿No crees que al menos deberías intentar explicarme por qué he de pasar por todo esto?”

Cerrando la reseña, diré que lo único que me molestó fue que el autor alargara tanto el final, provocando que casi se arruinara el personaje de Aliena, a pesar de que toma un decisión lógica.

Tranquilamente, Follet pudo cubrir los mismos años, sin necesidad de armar drama en los personajes.

La nota es 9/10 (4,5/5 ✨) por eso mismo. No había necesidad de hacerlos sufrir más.

Y, como esto es todo, me despido.

Hasta la próxima reseña.

Chaíto!!